martes, 12 de marzo de 2013

waty

We aaaaaare the yooouuuuuth. Eso suena mientras me dibujo a mí mismo y prostituyo mis sentidos al lapiz más afilado y la cara más sencilla. Ya no huele a nada y eso que el cenicero está lleno. Creo que voy a pintar un paisaje lleno de rallas, de ti, de botellas de colores cálidos, pintaré anfetamina y un mojito, pintaré una cama sucia llena de sangre y un edredón de Doraemon. Tiraré el dibujo por la ventana y cuando esté en el suelo, a unos 8 o 9 metros, me tiraré de cabeza para poder comerme todo eso, para taparme con ese edredón y para que tú y yo llenemos de verdad esa cama de sangre. Que no quede sobre un puto folio y, sobre todo, que no quede en mi cabeza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario